Anova fue desde mis inicios en esto de la baja temperatura la marca de referencia en sous vide doméstico. Desde un primer momento su diseño elegante y moderno me enamoró, y la verdad es que durante años y hasta el día de hoy sigue siendo para mi la marca de referencia en cualquier comparativa, como por ejemplo esta entre Anova y Rocook.
Hoy os propongo otra comparativa, pero en este caso entre los distintos modelos de circuladores de Anova disponibles a día de hoy en España. La pregunta del millón: ¿Con cuál de las tres deberías quedarte?
Vayamos por partes:
Anova Precision Cooker
La clásica. Se trata del «Es como un Golf» de Volkswagen pero llevado a la cocina de precisión. «Es como un Anova Precision Cooker» es probablemente cómo se venden el resto de termocirculadores hasta hoy. La máquina de cocción sous vide doméstica de referencia, con una buena potencia (900W), bonita y fiable. Una compra segura.
Es la máquina que llevo usando mayormente los últimos 4 años sin ninguna queja (bueno, quizás me he quejado alguna vez de lo complicado que es programar el tiempo de cocción, pero entonces pongo en marcha el temporizador del móvil y se me pasa).
Se trata de un modelo que en breve quedará superado por una nueva generación con un diseño más moderno, más pequeño y más mejor. Eso podrá molestar a los que quieren estar a la última, pero también les encantará a los que quieran tener una muy buena máquina a un precio razonable.
Veo que actualmente este modelo que yo usaba ya no se comercializa y ha dado paso a…
Nueva Anova Precision Cooker
Como decía se trata de la renovación de la Anova Precision Cooker, la máquina de referencia en lo que a cocina sous vide doméstica se refiere.
La potencia ha aumentado hasta los 1.000W, lo que la hace capaz de casi todo. Puede calentar hasta 20 litros de agua, lo que se traduce en que asumirá cualquier reto que le puedas plantear.
La programación del tiempo y temperatura, que en la anterior Anova era un punto débil, ahora es sencillo e inuitivo. Vamos, con este circulador seguro que no fallas.
Anova Nano
Es el modelo optimizado para el uso doméstico. Con un tamaño sensiblemente inferior al del Anova Clásico y unos mandos mucho más intuitivos (los que hayáis intentado programar el tiempo de cocción en un Anova clásico sabréis de lo que hablo) es una magnífica opción para empezar en esto de la baja temperatura con garantías. Si además tenemos en cuenta que su precio es realmente bajo (en el momento en el que escribo esto lo puedes conseguir en Amazon por sólo 99€ ) para mi es una gran compra lo mires por donde lo mires. Declarado como el mejor termocirculador doméstico en febrero de 2020 por The New York Times.
En este modelo se ha substituido el acero por el plástico, pero el acabado sigue transmitiendo calidad. Este cambio ha permitido reducir el peso hasta unos ridículos 600 gramos, lo que junto a su reducido tamaño la hace ideal para llevársela de viaje o de fin de semana.
Puestos a ponerle alguna pega para mi sería el tema de la potencia. Para cocciones aquítepilloaquítemato tipo huevos o pescados yo valoro que el agua llegue rápido a la temperatura adecuada para no tener que esperar más de la cuenta. El Anova Nano es algo menos potente que la Anova clásica (750W vs 900W), lo que se traduce en tiempos más largos para llegar a la temperatura final. Esto por lo general no supone un gran problema: puedes poner previamente el agua en un hervidor y luego ir añadiendo agua fría, puedes poner la inducción a tope unos minutos o bien puedes tener un poco de paciencia, que tampoco pasa nada.
Esta reducción de potencia también hace que la cantidad de agua que puede calentar baje de los 20 litros hasta los 11, lo que equivaldría a poder cocinar en general comida para unas 4 personas (cuanto mejor aislamiento tenga el recipiente en el que cocines, más fácil te será mantener la temperatura y más agua podrás poner).
En definitiva, una buena elección para aquellos que quieran empezar a cocinar a baja temperatura en casa y no pretendan cocinar piezas enormes.
Anova Pro
Esto ya son palabras mayores. De hecho, ¡para mi este sería ahora mismo el circulador más completo del mercado! Tiene un diseño muy cuidado y un tamaño similar al Anova clásico, pero cuenta con una pantalla enorme y unos mandos facilísimos de usar. La pieza para sujetar la máquina a la olla es extraíble (a diferencia del del Nano), lo que hace más fácil su uso en cubetas y tapas agujereadas para evitar la evaporación. Si a eso le sumamos una potencia de 1.200W que puede mover 12 litros por minuto y mantener estable la temperatura de hasta 100 litros de agua llegamos a la conclusión de que estamos ante un bicharraco apto tanto para cocinas profesionales como para nerds domésticos de la tecnología culinaria (como sería mi caso).
Con esta potencia el Anova Pro vendría a ser el Ferrari de los termocirculadores, permitiendo calentar el agua en un suspiro y con la promesa de poder funcionar ininterrumpidamente durante 10.000 horas. Casi nada.
¿La pega a tantas cosas buenas? Te la puedes imaginar: el precio. En el momento de escribir esto el precio son 429 pepinos en Amazon, un precio bastante por encima del resto de circuladores domésticos (pero aún así bastante por debajo del resto de máquinas sous vide profesionales).
En resumen: un maquinón que no te lo acabas. Rápido, preciso, resistente. Y muy recomendado para cocinar en cantidades importantes.
Y hasta aquí la comparativa de máquinas de Anova. ¡Elegid sabiamente y lanzaos al maravilloso mundo de la cocina sous vide!